El reflejo del mañana.

Por Aimée Padilla Había una vez en un pequeño pueblo, un niño llamado Paquito, conocido por su energía inagotable y su tendencia a meterse en líos. Su madre, una mujer paciente y cariñosa, a menudo se encontraba en aprietos tratando de mantener el ritmo de las travesuras de su hijo. En la escuela, Paquito era …